La familia de la productora Unahoramenos está sumida en el dolor ocasionado por la reciente pérdida del amigo y estrecho colaborador de esta casa, el escritor y dramaturgo Antonio Lozano (Tánger 1956-Gran Canaria, 2019), con el que mantenía una intensa relación profesional no sólo debido a su concurso en distintos proyectos escénicos producidos en los últimos años, sino por su vinculación al área de la gestión cultural durante la ejemplar etapa en la que Lozano ejerció como edil en el municipio de Agüimes en el que decidió instalarse en 1984 cuando llegó a Gran Canaria.
Lozano siempre admitió que lo que estaba sobrevalorado en esta sociedad era la acumulación de bienes de consumo como factor de éxito social y personal. “Está sobrevalorada la comunicación inmediata y virtual frente a la cultura como sistema de comunicación de ideas. Están sobrevalorados el éxito y la fama por la vía más fácil y rápida posible. Y como consecuencia está infravalorado, y eso es signo de una sociedad en decadencia, el esfuerzo para lograr los objetivos que uno se plantea en la vida”, dijo en una entrevista a cuento de su trabajo en la producción teatral ‘Me llamo Suleimán’.
Sobre las mutaciones que experimenta el nuevo siglo, también el novelista advirtió que la situación actual “habla a las claras del fracaso de la Humanidad, incapaz de gestionar el planeta en el que le ha tocado vivir de modo que todos los hombres y mujeres, por el hecho de serlos, tengan acceso a los derechos mínimos que deberán estar garantizados, empezando por el derecho a la alimentación. Solo una transformación profunda de ese sistema de gestión, y por lo tanto del sistema de relaciones económicas y políticas globales, pueden resolver el problema. Y quienes tienen en su mano llevar a cabo esas transformaciones no están dispuestos a hacerlo”.
El montaje teatral ‘Me llamo Suleimán’ que produjo Unahoramenos está inspirado en la obra homónima escrita por Antonio Lozano y publicada por la editorial Anaya en su colección ‘El volcán’. Lozano aclara que el mensaje de este libro se centra en la idea de que el emigrante es ante todo un ser humano único e irrepetible, que acomete una empresa heroica y generosa, puesto que la finalidad es la de salvar a los suyos aún a riesgo de perder su vida –tal como hicieron nuestros abuelos o bisabuelos en Canarias- y que su acción merece al menos que nos detengamos en hacernos preguntas sobre los motivos que lo mueven a emprender esa aventura.
Cuando ‘Me llamo Suleimán’ se presentó en Mali el año 2018 en el Teatro Blonba, en el marco de la décima edición del Festival Internacional Rentrèe Litteraire, precisamente el país de procedencia de su joven protagonista, el novelista confesó su emoción por poder mostrar la obra desde el otro lado de la frontera, “porque hasta la fecha siempre ha sido escenificada en lugares receptores de emigrantes y ahora se estrena en uno de los espacios geográficos emisores de dichos movimientos humanos. Nos interesa conocer cuál es la percepción del público desde ese otro lado de la frontera”, decía Lozano.
Junto al también escritor Alexis Ravelo fue el autor de otro éxito de producción de Unahoramenos, ‘El crimen de la perra Chona’, que con música y participación de Los Gofiones se estrenó en el teatro Cuyás y varios espacios públicos de la zona de Triana en 2014, bajo la dirección de Mario Vega.
Con respecto a las diferencias existente entre su trabajo como escritor y como dramaturgo, Lozano entendía que “en la novela eres dueño y señor del espacio, del tiempo y de los personajes. Tú pones los límites. Aquí (refiriéndose a su trabajo en el texto de ‘El crimen de la perra Chona’), sin embargo, tienes que adaptarte a las limitaciones que te impone el escenario, la duración del espectáculo, el director, las necesidades de producción, la estructura del espectáculo, la cantidad de actores, además, por supuesto, del hecho teatral: no es lo mismo escribir para que te lean que hacerlo para que te escuchen”.
Antonio Lozano nació en Tánger en 1956, aunque reside en Agüimes desde hace años (Gran Canaria), municipio del que fue concejal de Cultura entre 1987 y 2003. Fue director del Festival del Sur-Encuentro Teatral Tres Continentes y del Festival Internacional de Narración Oral «Cuenta con Agüimes». Su primera novela editada en 2002, ‘Harraga’ fue elogiada por escritores como Manuel Vázquez Montalbán, Dulce Chacón y Fernando Marías. Ganadora del I Premio Novelpol a la mejor novela negra publicada en España, obtuvo una mención especial del Jurado del Premio Memorial Silverio Cañada 2003 a la mejor primera novela negra, convocado por la Semana Negra de Gijón. Su novela editada cuatro años después, ‘El caso Sankara’ fue ganadora del I Premio Internacional de Novela Negra Ciudad de Carmona. También Lozano ha publicado ‘Preludio para una muerte’ en Ediciones B y ‘Donde mueren los ríos’, título que fue finalista del I Premio Brigada 21. Su último título en publicar fue ‘Un largo sueño en Tánger’. ‘El desfile de los malditos’, la última que terminó y cuya publicación está prevista para el mes de septiembre.